Aquella mañana entró a mi oficina una señorita, digamos de mediana edad, alta, elegante. Tacos finos - en la radio sonaba “ Fade to black”, del gran Mark-. Mientras fumaba sus delicados Virginia Slim, me cuenta su problema -la atmósfera? Film detectivesco de los 30’s, obvio- ella se encontraba en uno de esos típicos dilemas existenciales: Crecer o No crecer. Por eso aquí, en mi curso sobre “como hacerte millonario con tu Blogg”, enseñamos a los alumnos de todas las etnias, sexos, religiones y simpatizantes de cualquier equipo de fútbol, salvo los de la academia, porque un incha de Racing me hacía bullying cuando era chico, a ¡¡hacerse millonarios con su Blogg!!.

Ella era docente de literatura, quería que sus escritos y los de sus alumnos alcancen a ser leídos por una gran cantidad de personas en el mundo de habla hispana.

De repente, cambió el ambiente, cambió el tono, el ritmo y el tema: Where Are You Tonight de Bob Dylan, explout!- continué con mi entrevista...

- Ok, el lunes comienzo mi Master class, estás aceptada, sigamos con el cuestionario.

- Perfecto.

- Que experiencia tienes en el mundo digital?

- Cuando tenía 5 años me regalaron una maquina de escribir Olivetti eléctrica portátil.

- Correcto, ¿en la familia hay alguna persona con inclinaciones tecnológicas? ¿Vocaciones hereditarias?

- Si, mi tío abuelo estuvo en el equipo de creación del primer colectivo de la República Argentina.

- Interesante- dije con mi voz de “Crooner”, mientras asentía con la cabeza y anotaba al lado de mi reciente garabato con forma de Minion, me había quedado tan real…!

- Composición familiar?

- Para que pregunta?

- Pasa que en un tutorial que ví esta mañana dice que preguntar tonterías ayuda al cliente a encontrar otras perspectivas y, también, al entrevistador a ver el grado y capacidad de atención del alumno. Me acuerdo que un profesor de una facultad cuando alguien le preguntaba alguna pavada, decía: “mi abuela patea calefones y sale agua abollada”.

- Ahh, yo sabía que estaba frente un verdadero profesional!

- De verdad?

- No, tiene usted pinta de ser un auténtico chapucero desalineado y desagradable, pero como el aviso decía que trabaja gratis, pensé: no pierdo nada; y entonces vine.

- Me agrada que seamos sinceros.

Comencé con las preguntas serias; a qué público apunta?; que nivel de compromiso tiene con la tarea?; que potencial cree que tiene su material para ser visto por todos los admiradores de la gran nube?. En eso moví accidentalmente mi celular y se encendió la linterna iluminando su rostro. Al quedar encandilada su cara se transformó, pasó de diva de los noventa a parecer una mujer acusada de herejías del 1700, con terror a la hoguera. Empezó a hablar raro, y decía cosas extrañas, yo me quedé congelado. Ella decía una y otra vez:

- Yo no maté al inspector de AFIP oficial. ¡Tiene que creerme!. ¡Tampoco seduje al plomero para que lo enterrara, ni lo envenené después de ayudarme! ¡Creame por favor!

- Tranquilícese señora, por favor.

Apoyé mi mano en su hombro, le dí un vaso de agua, comenzó a calmarse y a respirar más lenta y profundamente. Luego le dije que viniera el lunes siguiente, les avisé a todos los demás clientes que suspendía la clase para más adelante, y me vine a vivir a España, aquí la vida es más tranquila, vivo un paso a la vez.

- ¡Mozo! ¿El cafè?

- ¡Ya voy! ¡ya voy! - ahhrrgggpuck, tilin tilin tilin.

Braian es un ancianito muy inteligente y leído, le gusta mucho la literatura y, sobre todo, contar historias a sus robodogs, ellos le hacen compañía todo el tiempo. El les cambia el aceite, los lleva a la plaza virtual de su área y ellos, que tienen el chip de sentimientos HR50, se emocionan con sus adorables cuentos y relatos.

Este es el que más le gusta contarles:

El Enderman curioso.

Lauropalooza es un Enderman muy curioso. En una de sus visitas al mundo de Jacotapoc397 se encontró en la necesidad de aprender cosas nuevas, sin saber porqué; solo le surgió el deseo de hacer una bondiola casera. Vió unos cuantos videos para ver si podía entender un poco sobre el proceso, es una costumbre muy común entre los aldeanos y los Steve, pero no se había visto nunca a un Enderman hacerlo.

Jacotapoc397 estaba en modo creativo, así que era inútil intentar matarlo, en vez de eso decidió matar el tiempo investigando sobre este particular fiambre. Luego de averiguar sobre los insumos necesarios film microperforado, red de hilo, condimentos varios, sal gruesa y sal de cura, asistieron él y su amigo el Creeper, a una distribuidora que estaba escondida en una selva donde no había casi nadie, porque había poco hierro y oxidiana, sería tranquilo el viaje.

La distribuidora de dos pisos, que contaba con varias decoraciones interesantes, era atendida por sus dueños aldeanos. Se asustaron mucho al verlos al Enderman y al Creeper que lo acompañaba, carlos2201. Cuando por fin les pudieron dar a entender que venían en son de paz, los aldeanos les permitieron el ingreso. Atendían una joven y otro más mayor, quizás era el progenitor.

Como Lauropalooza no sabía más que lo que había visto en los videos, comenzó a hacer preguntas, también para confirmar algunos conceptos básicos porque los tutoriales, a veces, son demasiado sintéticos. Así que empezó a ver las cosas que tenían en exhibición y a hacer las preguntas correspondientes. Era muy nuevo en estos menesteres de los aldeanos, no comprendía nada. Observó un objeto extraño, una especie de cilindro cubierto de un cartón con imágenes de fuego. Mientras hablaba con el anciano sobre las decisiones erradas del Creador, Jacotapoc397, para sacar temas de conversación por hablar nomás, le preguntó por el antes mencionado cilindro:

- Es una especie de hilo encerado, para prender una fogata- dijo el anciano.

- Ahh, yo lo enciendo con dos piedras.

- Claro, los aldeanos de antes, como yo encendíamos diarios con un fósforo. Pero los diarios cada vez traen menos páginas!

- ¡Que interesante! ¿Que es un diario?

- Un dispositivo de papel, que era muy importante antes del 4g, en el que venían impresas con tinta las noticias de la aldea. Lo llevábamos cuando íbamos al excusado para leerlo, así nos enterabamos de lo que pasaba, después lo usábamos para prender las fogatas, ahora vamos al baño con el celular, pero no lo podemos a tirar al fuego como el diario!!!

Pero el anciano no sabía que los enderman y los creepers no tienen buen sentido del humor, así que los mataron rápido, ya que el Creador estaba terminando su partida.

Envía tu email si fue de tu agrado el texto. Abrazo!

Voy poniendo a prueba todos los preceptos o principios que van resaltando entre los textos, así como migajas, hay palabras para ir siguiendo, para desconcentrarme, desconcertarme y obligar a que me surja un sentido genuino de la ubicación. Yo quiero encerrarme en un cuarto acolchonado, ponerme mi camisa de fuerza y esperar hasta que pase la luna llena, pero es de día. La luna llena está adentro mío. El lobo terrible que otrora fue mi perro guardián quiere consumirme por dentro. Hambriento, descontrolado, inmune a las sensibilidades. Quiere tomar todo el control, fue entrando en confianza como un adorable cachorrito al que alcé en mis brazos, pero hoy quiere comerme vivo. Quiere ver cómo grito mientras desgarra mis entrañas. Quiere poder. Y yo no puedo más que destruirme para salvar mi alma. Tirarle humo de tabaco, nicotina y alquitrán. Cuatro mil sustancias tóxicas no logran aplacarlo. Esta es mi lucha, no es genuina obvio, es funcional a la sociedad. Es obsecuente con el lector. Ese lector que adulo, al que le pido misericordia cuando me lee, que sea compasivo conmigo, porque ya yo me estoy matando. Ya estoy exponiendo mis miserias para llamar su atención; para lograr un aplauso de limosnas en la gorra. Ya doy una opinión, una bomba de pétalos de flores que explota en lluvia primaveral. Una lluvia de granizos en plena sequía. Piedra sin llover. Peor que nada. No deja nada, no queda nada, barre con todo lo que quedaba más o menos en pie. Los deja rezando que vengan cosechas mejores cuando yo ya no esté. Así que, sí, soy genuino, socialmente genuino. Soy correctamente genuino. Deliro cuando siento que hay que hacerlo. Sufro cuando siento que hay que sufrir. Trabajo cuando siento que hay que trabajar. Soy más genuino que ayer y menos genuino que mañana. Y siempre seré más y más genuino, hasta que solo queden cenizas en una urna, nada es más genuino que las cenizas. Cenizas que atestiguan la farsa que hubo antes. La farsa de la carne en los huesos, la farsa de lo que ya no será nunca más.